RECICLAR Y RE-CIRCULAR, HACER MÁS CON MENOS
En la celebración del Día Mundial del Reciclaje, reflexionamos sobre los beneficios que traería una economía circular, siendo esta la iniciativa esencial que impulsa construir un futuro más sostenible y resiliente. Vivimos en un mundo en el que el consumismo y la producción de desechos son alarmantes, pues en el mundo se recolectan unos 11.200 millones de toneladas de residuos sólidos, según datos de la ONU, lo que ha generado una grave crisis ambiental y climática, por ello, el reciclaje se convierte en una práctica fundamental para reducir nuestra huella de carbono y avanzar hacia un modelo de desarrollo sostenible.
La economía circular se presenta como una alternativa eficaz para, reducir los residuos y minimizar su impacto ambiental, basándose en la idea de que los productos, materiales y recursos deben circular en ciclos cerrados, es decir, reducir al mínimo el uso de recursos necesarios para producir nuevos bienes y servicios y para conseguir esto debemos reutilizar, reciclar y reparar los productos… en pocas palabras, hacer más con menos.
La reducción en la presión sobre los recursos naturales, para maximizar su uso y minimizar su desperdicio, la disminución de gases de efecto invernadero, pues no se producen nuevos materiales y así no hay un exceso en la generación de energía, la creación de empleos verdes, para mejorar la eficiencia económica al reducir costos y aumentar la competitividad de las empresas son algunos de los beneficios de este modelo. Sin embargo, la realidad es que todavía estamos muy lejos de alcanzar esta meta, según el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), solo el 8.6% de los materiales utilizados en la economía global son reciclados, números alarmantes, especialmente cuando los impactos del cambio climático son cada vez más evidentes y afectan directamente nuestras comunidades.
En este sentido, se hace un llamado para que los gobiernos, el sector empresarial y productivo y los ciudadanos asumamos un compromiso más fuerte y trabajemos juntos para implementar políticas y prácticas sostenibles. Además, de fomentar la educación ambiental y el desarrollo de tecnologías limpias. Por mencionar algunos elementos e iniciativas que ofrecen importantes beneficios y resultados en materia de reciclaje y economía circular para las grandes industrias, es que de 2021 a 2022, en todas las plantas de Sudamérica de Schneider Electric, se ha logrado una importante reducción del 20% en la intensidad de generación de residuos (g/h: gramo de residuo generado dividido por horas trabajadas).
Es hora de unirnos para hacer real la transición y son precisamente este tipo de fechas las que nos recuerdan la importancia de asumir un compromiso responsable con el planeta y como ciudadanos, para contribuir con sencillas acciones desde casa, como separar los residuos, utilizar productos reciclados y apoyar a las empresas sostenibles. ¡El cambio comienza por nosotros!
Javier Ortiz
Presidente Cluster Andino Schneider Electric
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