Según el informe Brand Tracker de Tier Mobility, España lidera en la UE el uso de bicicletas y patinetes eléctricos. Las causas que han generado este crecimiento, según el informe, son facilidad de uso, la comodidad, bajo impacto medioambiental y su seguridad. En efecto, se trata de un medio que ofrece numerosas ventajas, sobre todo a nivel medioambiental.
- No emiten gases de efecto invernadero.
- Reduce la huella de carbono. Según un estudio de Ecoinvent, la huella de carbono de una bicicleta eléctrica es hasta 16 veces inferior a la de un coche convencional.
- Reduce la contaminación acústica.
- Ayuda a descongestionar el tráfico de las ciudades.
Sin embargo, resultará muy difícil afianzar este avance de la movilidad sostenible si no se facilita la recarga de estas formas de transporte alternativas a los medios tradicionales, como el coche o la moto de gasolina o diésel.
Infraestructuras como los edificios sostenibles tienen mucho que decir al respecto. Teniendo todas las capacidades necesarias para convertirse en un aliado perfecto para afianzar su crecimiento.
De hecho, la normativa europea contempla establecer puntos de recarga obligatorios en nuevos edificios, tanto residenciales como no residenciales.
Medidas de la UE para reforzar los edificios y movilidad sostenible
Recientemente el Parlamento Europeo ha aprobado enmiendas en la propuesta de Directiva sobre eficiencia energética de los edificios. Tras estas modificaciones la UE establece diversas medidas para que los edificios cuenten con preinstalaciones y puntos de recarga de forma obligatoria y en ciertas circunstancias. Diferenciando entre los edificios residenciales y no residenciales. Respecto a la creación de puntos de recarga en los aparcamientos:
- Los edificios no residenciales que tengan más de cinco plazas de aparcamiento dentro del edificio tienen que tener al menos un punto de recarga por cada cinco plazas. También se debe garantizar el precableado para todo vehículo eléctrico, incluyendo plazas de aparcamiento para bicicletas. Deben representar como mínimo el 15% de la capacidad total.
Para aquellos casos en los que haya más de veinte plazas de aparcamientos (en algunos casos diez) antes del 1 de enero de 2027 se deben crear al menos un punto de recarga por cada veinte plazas. Cuando se trata de edificios públicos,antes del 1 de enero de 2033 se garantizará el precableado para una de cada dos plazas.
- Los edificios residenciales también deben asegurar la instalación de puntos de recarga para vehículos, bicicletas y otros vehículos pertenecientes a la categoría L. El edificio tiene que tener al menos un punto de recarga y dos plazas de aparcamiento para bicicletas por cada vivienda.
No obstante, los Estados miembros pueden ajustar los requisitos tanto en los edificios residenciales como no residenciales cuando su cumplimiento suponga costes elevados que sean imposibles de cubrir.
Se establecen medidas para acelerar todo el procedimiento de instalación. Entre la solicitud y la instalación no pueden superar los seis meses. Además, se garantiza la asistencia técnica necesaria y la coherencia entre las políticas en materia de edificios, movilidad ecológica, energía y biodiversidad.
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