Los sistemas de distribución eléctrica están evolucionando hacia configuraciones más flexibles, pero, al mismo tiempo, más complejas, ya que integran sistemas de control, generación de renovables, alimentación de nuevas cargas como el vehículo eléctrico o la necesidad de electrificación de ciertos procesos para descarbonizar las operaciones. Al mismo tiempo, debemos asegurar el cumplimiento normativo, la continuidad de servicio y la seguridad de instalaciones y personas. En definitiva, en un mundo cada vez más electrificado y digitalizado, la distribución de energía también se vuelve más compleja de gestionar. Esta complejidad implica que, ante incidencias, también sea más difícil encontrar la causa y solucionar los problemas. Pero puede abordarse con herramientas digitales como el gemelo digital, que además permite conseguir ahorros de hasta un 40% en los costes eléctricos relacionados con las operaciones.
Actualmente, la principal herramienta del personal técnico en todas las etapas, desde el diseño hasta la explotación, es el diagrama unifilar de la instalación eléctrica. Sin embargo, para la representación de este diagrama seguimos usando el mismo tipo de herramientas CAD y, lo que es más alarmante, en muchos casos estos esquemas no están actualizados o acumulan anotaciones a mano, provocando que en ocasiones circulen diferentes versiones del esquema sin saber cuál es el correcto. Esta situación entraña potenciales riesgos para las instalaciones y para cualquier operario que deba realizar trabajos en la instalación eléctrica.
Un cambio de enfoque con numerosas ventajas
Para minimizar estos riesgos, tenemos que aprovechar todas las disrupciones tecnológicas que estén a nuestro alcance para gestionar las instalaciones de forma diferente. Para ello, tenemos también que pensarlas y diseñarlas de forma diferente, con herramientas digitales. Con ellas podemos lograr eficiencias en la fase de diseño de hasta un 50% de tiempo y hasta un 80% de ahorros en los costes asociados a los constantes rediseños y modificaciones.
El máximo exponente del uso de herramientas digitales es el gemelo digital de la instalación, es decir, un modelo de la red eléctrica basada en objetos, donde cada objeto es un dispositivo de la red eléctrica y contiene atributos – las características de cada equipo- y métodos. Al diseñar digitalmente nuestra instalación, podemos aprovechar este mismo modelo digital para su uso en la fase de operaciones y de mantenimiento. Podemos realizar estudios eléctricos y simulaciones del comportamiento ante diferentes escenarios.
El gemelo digital eléctrico es la evolución de los diagramas convencionales. Con él, se pueden lograr eficiencias de hasta un 40% en los gastos de OPEX. Además, impacta directamente en la seguridad, reduciendo no sólo las pérdidas por paradas de producción sino también los incidentes causados por fuego en instalaciones industriales, donde la electricidad se sitúa como principal causante. La seguridad es el primer principio que todos los diseñadores e ingenieros han de primar en sus proyectos.
Puesto que, para realizar estudios eléctricos como coordinación de protecciones, flujos de cargas, cortocircuito o arco eléctrico, es necesario construir un modelo de la red, disponer del gemelo digital eléctrico nos proporciona más agilidad y eficiencia en costes.
Gemelo digital para la instalación del futuro
En Schneider Electric creemos en un futuro donde las operaciones serán cada vez más digitales y automatizadas. Tecnologías como el modelado BIM, machine learning, la computación en la nube y el Internet de las Cosas, conducirán a una mayor eficiencia operativa, resiliencia y sostenibilidad. El gemelo digital del sistema eléctrico es el primer paso para poner a los gestores de la instalación eléctrica en el camino hacia este futuro
Un ejemplo para conseguirlo es nuestra propuesta de gemelo digital eléctrico basada en ETAP, el software de modelado y simulación líder a nivel mundial: se trata de EcoStruxure Power, una plataforma tecnológica basada en IoT, que integra productos de protección y control inteligentes y sensórica avanzada, que no solo permitirán disponer de instalaciones más seguras sino también más resilientes y más eficientes.
Lo principal es saber qué está pasando en cada momento en nuestra instalación. Si queremos aumentar nuestro conocimiento de la misma, necesitamos sensorizar y automatizar la recogida de datos.
¿Qué vamos a hacer con tanta información? Tratarla y analizarla para predecir y prevenir eventuales incidentes que puedan suponer un riesgo para las personas, los equipos y la propia instalación, gracias a analíticas en la nube y a políticas de mantenimiento predictivo. No hay operación de campo más segura que aquella que se ejecuta con toda la información disponible al alcance de tu mano. Fabricantes, ingenierías, contratistas, cuadristas, integradores de sistemas, personal de operaciones, de mantenimiento … Todos desempeñamos un papel muy relevante sobre el impacto que tienen las instalaciones eléctricas de nuestros edificios en las personas y el medio ambiente. Infórmate más sobre cómo mejorar la seguridad y la eficiencia de tus instalaciones, con EcoStruxure Power.
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