Un sistema eléctrico eficiente debe ser parte de nuestra planeación y control de gastos. Un ejemplo es la compensación de potencia reactiva implementando tecnologías de punta. Los bancos de capacitores se han utilizado por más de 40 años para la compensación de los requerimientos de potencia reactiva y elevación de tensión en los sistemas de potencia. Ahora es momento de que formen parte de la recuperación económica de las empresas.
Busquemos la mejora continua
Lograr una recuperación económica y a su vez tener un sistema eléctrico sano es lo que toda empresa debería considerar como una mejora continua. Para ello debemos ser observadores contundentes de la energía utilizada en nuestros procesos y poder contabilizarla. Esto en base a mediciones y estudios de calidad de la energía que nos muestren dónde podemos ser más eficientes en nuestro consumo.
Seamos conscientes de las afectaciones que conlleva una mala gestión de la energía en nuestras instalaciones. Algunos ejemplos son el tener un bajo factor de potencia, dónde los pagos facturados son mayores a la energía realmente aprovechada.
La medición como primer paso hacia el uso eficiente de la energía
Primeramente, debemos hacernos las siguientes preguntas:
- ¿Qué tanto conocemos nuestro consumo energético?
- ¿Estamos haciendo un uso optimo de la energía que recibimos?
- ¿Cuánto es lo que se paga por la energía desperdiciada en mi proceso?
Bien dicen por ahí, todo lo que se puede medir se puede mejorar. Para responder estas interrogantes podemos apoyarnos de equipos de medición confiables, medidores que puedan mostrarnos de forma clara los puntos que se pueden mejorar dentro del sistema eléctrico de la instalación.
Una de las mediciones que debemos tener en cuenta es la del factor de potencia, el cual está limitado bajo lineamientos establecidos en el Código de Red y que no sólo implica una multa por parte del suministrador por incumplimiento, sino que las afectaciones a otros equipo como transformadores, motores, etc, pueden derivar en altos gastos.
Compensación de energía reactiva
Mediante la utilización de bancos de capacitores se pueden lograr el ahorro energético de dos formas principalmente:
- Reducción del consumo de la potencia reactiva que se refleja al minimizar la magnitud de la corriente que las cargas consumen.
- Mejora del voltaje, ya que, al encontrarse en valores cercanos al nominal, la magnitud de la corriente también se reduce.
Por lo tanto, podemos obtener un ahorro energético que se traduce en económico, reflejado de la siguiente manera:
- Eliminación de la penalización por bajo factor de potencia.
- Aumento de la capacidad en transformadores, líneas y generadores.
- Reducción de caídas de tensión.
- Reducción de pérdidas en los conductores por efecto Joule.
- Mantenimiento y protección de la vida útil de sus instalaciones.
En general, la utilización de los bancos de capacitores como Varset de Schneider Electric, repercutirá en mejorar el desempeño del sistema eléctrico por los factores previamente descritos, los cuales tendrán un impacto económico positivo para el propietario de la instalación. Además, se evitarán penalizaciones por la compañía suministradora, y se obtendrá una pequeña bonificación en la facturación de la energía eléctrica, gracias a la amplia gama de capacidades (kVAR) con la que contamos.
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