Pongámonos en situación: te encuentras en la búsqueda activa de trabajo esperando que en alguno de los procesos abiertos seas una de las personas que se encuentra dentro del 40% de finalistas en la primera fase, tras lo que vendría la esperada llamada para realizar una primera entrevista. Y entonces, ¡enhorabuena, ya tienes fecha y hora para tu primer encuentro! En aproximadamente media hora debes ser capaz de presentarte como la persona ideal para cubrir el puesto en cuestión. Sabemos que es un paso muy importante en tu carrera profesional, por eso queremos darte algunos consejos para que afrontes este reto con éxito.
Antes de la entrevista
Ahora que ya has hablado con Recursos Humanos y te han realizado la descripción en más detalle del puesto al que has aplicado, ha llegado el momento de preparar la entrevista en tres simples pasos:
- Infórmate sobre la empresa. Bucea un poco en su página web, visita sus perfiles en redes sociales y toma notas de los puntos clave a tener en cuenta durante la entrevista. ¿A qué se dedica? ¿Quién es su cliente? ¿Cuáles son sus valores? Esta última pregunta cobra especial relevancia para entender si realmente encajarías, a nivel emocional, con los ideales de la empresa. Además, tienes a tu disposición herramientas muy útiles para conocer más a fondo a la compañía con opiniones reales de las personas que allí trabajan. En este sentido, Glassdoor o Indeed te pueden dar información muy útil.
- Prepara preguntas sobre el puesto vacante. Es completamente normal tener preguntas tras recibir más información sobre la posición, de hecho se espera que las tengas. Plantear tus dudas no denota falta de confianza, sino todo lo contrario; lleva una lista de preguntas para comprender mejor durante la entrevista qué es lo que buscan y si realmente te gustaría o podrías contribuir en ello.
- Identifica tus puntos fuertes para la posición en concreto. Cada puesto requiere de unas características distintas y específicas, comprende cuáles se necesitan en este caso y mira de qué forma podrías ayudar o como encajarías mejor.
Durante la entrevista
El consejo más valioso que podemos darte es muy simple: sé tú mismo/a. Los nervios son totalmente normales y nadie te juzgará por ello, sólo tienes que intentar relajarte presentándote tal y como eres. Piensa que se trata de una charla sobre ti, no hay respuestas correctas o incorrectas, simplemente expondrás tu experiencia, aficiones, pasiones…, todo ello información que conoces más que de sobras, ¿verdad? Ahora que ya estás más tranquilo/a, aquí van algunas recomendaciones para el momento de la entrevista:
- Proyéctate en la posición. Comenta cómo tu experiencia, gustos, formación, etc., pueden ser relevantes para el puesto, qué valor adicional puedes aportar. Recuerda que este punto ya lo tenías trabajado previamente antes de la entrevista, por lo que debería resultarte muy fácil e intuitivo.
- Lo que bien empieza, bien acaba. La persona que te entreviste recordará con mayor nitidez, por norma general, la presentación inicial y el cierre de la entrevista. En el momento de las presentaciones, interésate por ella y mantén una conversación, recuerda que no es tan sólo unidireccional. Para finalizar la entrevista, puedes pedir feedback o hacer un breve resumen de lo hablado anteriormente y lo que más te gustaría destacar, así te aseguras de que recuerde mejor esta información.
- Pon ejemplos para aportar valor. Siempre que puedas, ejemplifica tu experiencia con situaciones reales en las que te hayas encontrado para demostrar cómo has solucionado un problema o encontrado alternativas creativas a una situación.
Estos consejos sirven para cualquier tipo de entrevista, ya sea presencial o virtual. Estas últimas cobran mayor relevancia en un panorama internacional cada vez más digitalizado, derribando los límites de tiempo y espacio. Si es tu caso, te damos un último consejo: busca un lugar tranquilo para realizar la entrevista, con buena luz y conexión a internet. Enciende tu cámara y utiliza, si puedes, unos auriculares con micrófono para que haya las menores alteraciones de ruido posibles. En esta situación, al perder el contacto físico con la persona y el entorno de trabajo, es muy importante que formules más preguntas para hacerte una mejor idea tanto de la posición como del entorno laboral.
Trabajar en Schneider Electric
Como bien anunciábamos al inicio del artículo, estar en consonancia con los valores empresariales es esencial para poder desarrollar tu carrera en una compañía determinada. Antes de aplicar a posiciones vacantes, piensa bien en qué tipo de empresa te gustaría trabajar y comprueba que realmente vuestros valores encajan.
En Schneider Electric valoramos el talento, fomentando siempre la diversidad e inclusión. Creemos que la diversidad es totalmente clave para la progresión empresarial, nos aporta frescura y distintos puntos de vista sobre una misma cuestión que, de otro modo, sería imposible. Porque al final son las grandes personas quienes hacen de Schneider Electric una gran compañía.
Si te sientes identificado/a con nuestros valores, te animamos a ver nuestra sección de empleos. Esperamos poder conocerte en una entrevista futura, queremos descubrir el talento que te hace único/a.
Añadir comentario